Nací en Santander, en la Clínica Matorras, por aquello de las modernidades, ya que todos mis hermanos nacieron en casa. Mi familia, padre, madre, cuatro abuelos, ocho bisabuelos, todos son de Pontejos.
Este es mi pueblo. He vivido en Santander durante algo más de trece años, y no me arrepiento. Mi casa era muy mona y coqueta y estaba muy bien situada, en una zona tranquila entre el centro y la playa. Pero he vuelto al pueblo. Y tampoco me arrepiento. Todos estamos muy a gusto aquí, y estamos disfrutando muchísimo eso de "vivir en el campo".
Pontejos está a diez kilómetros de Santander, de los cuales ocho son autovía, por tanto está muy bien comunicado. Cruzando el puente sobre la ría de Solía se llega a El Astillero, el pueblo importante más cercano, a dos kilómetros. A continuación en dirección a Santander, está Maliaño, que por su cercanía se ha convertido prácticamente en la ciudad dormitorio de Santander; allí hay varios centros comerciales y polígonos industriales, y también está el Aeropuerto.
Estamos al sur de la bahía de Santander, una de las bahías más bellas del mundo. Y no lo digo yo. Desde mi casa se ve parte de la bahía y gran parte de Santander, su parte de cara a la bahía, es decir, lo más bonito.
En Pontejos todo el mundo se conocía. Hace quince años no podías salir a la calle sin que se enterara todo el mundo. Era lo que menos me gustaba del pueblo. Ahora, gracias a la corta distancia, al mejor precio de la vivienda y por qué no decirlo, a la belleza del entorno, han construído varias urbanizaciones y algunos edificios de pisos, y ya no todo el mundo te saluda cuando te cruzas con él. Esto es lo que menos me gusta ahora.
En Pontejos ahora tenemos farmacia, sucursal bancaria (no imagináis de qué banco?), gestorías, varias peluquerías, guardería, una sala de internet pública, un centro de la tercera edad, restaurantes de los de toda la vida y también de los de postín; tenemos un Club de Remo, un Club de Fútbol y equipo de bolos. El pueblo está creciendo, pero tengo que decir que sigue manteniendo ese olor a hierba recién cortada, el sonido de pájaros, gallos y perros, ese silencio que permite oir el viento y las gotas de lluvia, vacas pastando en prados, gente paseando...
Este es mi pueblo. ¿Os gusta?
Me ha encantado la descripcion de tu pueblo, tu entorno.... Fiel a la realidad, comprobado!!!
ResponderEliminarEs un lugar ideal para vivir... Precioso!!! Besitos...
Tu pueblo parece un sitio estupendo para vivir y además con lo que me gusta a mí Cantabria. Estuvimos unos años que en Semana Santa ibamos siempre a los Picos de Europa y unos días nos quedabamos en Potes. Ahora hace un par de años que no vamos pero no creo que tardemos mucho en repetir experiencia
ResponderEliminarBesos
Dominique
Blanca, gracias por el premio, a ver si me siento y pongo la entrada.
ResponderEliminarMe encanta tu pueblo y lo que pones sobre que antes no te gustaba que todo el mundo te conociera y ahora no te gusta que la gente no salude, ja ja, suscribo todas tus palabras.
A mi me ha pasado lo mismo con el mio. También yo me fui de aquí con 5 años y volví con 25.
Pontejos es precioso, y Santander y toda Cantabria. No he ido nunca, pero es de esos sitios que siempre tienes en la agenda.
Si algún día me decido, tomo nota de tu pueblo y hacerte una visita.
besazos
Elén
Farolillos Chinos
También nací en la clínica Matorras! Somos de los que más cerca hemos nacido del mar en Cantabria...
ResponderEliminarSaludos,
JP
Historias de JP
Blanca, que bonito es tu pueblo.
ResponderEliminarLa descripción que haces de él, es genial. Debe ser un gozo vivir en el.
Besos
Juani
A mí me encanta toda Cantabria... mi Pedrito, esa otra mitad de mi corazón, estuvo trabajando más de un año en un proyecto y yo tuve la suerte de irme varias veces con él...
ResponderEliminarRecorrimos Cantabria de punta a punta y guardo maravillosos recuerdos. Y uno muy especial del atardecer desde el Palacio de la Magdalena. También tenemos buenos amigos allí.
Y es uno de los lugares imprescindibles a los que pienso llevar a mi chini del alma cuando la tenga en mis brazos... sin dudarlo, porque es un cachito de cielo, un trocito de paraiso... ¿¡se nota mucho que me gusta??
besos...